¿Me puedo quedar sordo por escuchar música fuerte?

¿Te ha pasado que tras una sesión intensa de música te zumban los oídos o sientes que no escuchas tan bien como antes? Estos podrían ser signos de que estás jugando con tu audición.
En este artículo vamos a explorar cómo el volumen alto puede dañar tus oídos de manera permanente y qué señales deberían hacerte reaccionar.
Riesgos de escuchar música a un volumen alto
Escuchar música a un volumen demasiado alto puede tener varios riesgos para la salud auditiva. Aquí algunos de los peligros más significativos:
- Pérdida auditiva inducida por ruido: La exposición continua a altos niveles de sonido puede dañar las delicadas células ciliadas del oído interno, lo que lleva a una pérdida auditiva permanente. Este tipo de pérdida auditiva es gradual y puede pasar desapercibida hasta que se vuelva significativa.
- Trauma acústico: La exposición a un sonido extremadamente alto, incluso por un breve período, puede causar un trauma acústico, resultando en una pérdida auditiva súbita y a veces permanente.
- Tinnitus: La exposición a sonidos fuertes puede provocar tinnitus, una condición en la que se escuchan zumbidos, silbidos o ruidos similares en los oídos de forma constante o intermitente. Esta condición puede ser temporal o permanente y, en algunos casos, puede ser severamente perturbadora.
- Hipersensibilidad al sonido: Conocida como hiperacusia, esta condición puede ser el resultado de una exposición prolongada a sonidos altos, haciendo que los sonidos de intensidad normal sean percibidos como intolerablemente fuertes y molestos.
- Fatiga auditiva: Escuchar sonidos a un volumen alto por períodos prolongados puede causar fatiga en las estructuras del oído, llevando a una disminución temporal de la audición y a una sensación de plenitud en los oídos.
¿Me puedo quedar sordo por escuchar música fuerte?
Sí, escuchar música a un volumen muy alto puede llevarte a perder audición, incluyendo sordera, especialmente si la exposición es frecuente y prolongada.
El daño auditivo ocurre debido al impacto negativo sobre las células ciliadas del oído interno. Estas células son responsables de convertir las ondas sonoras en señales eléctricas que el cerebro interpreta como sonido. Cuando estas células se dañan debido a la exposición a sonidos excesivamente altos, pueden perder su funcionalidad permanentemente.
La sordera inducida por ruido puede ser gradual y acumulativa, lo que significa que el daño puede acumularse con el tiempo antes de que la persona se dé cuenta de la severidad de la pérdida auditiva.

¿Qué tengo que hacer si he escuchado mucho tiempo música alta?
Si has estado expuesto a música alta por un tiempo prolongado, es importante estar atento a ciertos signos y síntomas que podrían indicar daño auditivo.
Señales de alerta
- Tinnitus: Escuchar zumbidos, silbidos o cualquier otro ruido constante en los oídos.
- Dificultad para entender el habla: Tener problemas para seguir conversaciones, especialmente en ambientes ruidosos.
- Sensación de oídos tapados: Sentir que tus oídos están llenos o tapados.
- Pérdida auditiva: Notar que tienes que subir el volumen de los dispositivos más de lo usual.
- Dolor o incomodidad en los oídos: Experimentar dolor sin ninguna causa aparente.
- Hipersensibilidad a sonidos normales: Sentir que sonidos ordinarios son demasiado fuertes o molestos.
Si sientes algunas de estas sensaciones y quieres saber el estado real de tus oídos, en cualquier centro auditivo de tu ciudad podrán hacerte una evaluación auditiva para conocer el estado de salud de tus oídos (fuente de la información: https://www.aparatoauditivo.mx/ciudades-mexico/ciudad-juarez)
Pasos a seguir
- Reduce la exposición al ruido: Toma un descanso de escuchar música y evita ambientes ruidosos para permitir que tus oídos se recuperen.
- Consulta con un profesional: Si experimentas alguno de los síntomas mencionados, especialmente si persisten, es importante consultar a un otorrinolaringólogo o a un audiólogo.
- Evaluación auditiva: Realizar un examen de audición para determinar si hay pérdida auditiva y su severidad.
- Protección auditiva: Considera el uso de protectores auditivos en situaciones donde te expongas a ruidos fuertes para prevenir más daño.
- Educación sobre salud auditiva: Informarte sobre cómo mantener una buena salud auditiva y las mejores prácticas para cuidar tus oídos.
- Adaptaciones en el estilo de vida: Ajustar el volumen a niveles seguros al usar dispositivos de audio y limitar el tiempo de exposición al ruido.












